Para considerar:
- El reemplazo de harina de pescado implica un cambio hacia ingredientes con un perfil alterado de nutrientes y minerales que pueden alterar la fisiología digestiva de los peces.
- El balance de electrolitos en la dieta (dEB) puede alterar los flujos de sal y agua durante la digestión en la trucha arcoíris.
- La osmorregulación del tracto gastrointestinal es más fuerte en la última parte del intestino, donde los peces pudieron contrastar la alteración homeostática causada por la dieta.
- El dEB alteró la entrada de agua en el estómago y el intestino proximal, pero no en el intestino medio y distal.
- El disturbio osmótico causado por la dieta afectó la digestibilidad de los nutrientes en los segmentos intestinales finales.
La formulación de alimentos para acuicultura está cambiando de harina y aceite de pescado a otros ingredientes, como ingredientes de origen vegetal, que conducen a diferentes niveles y formas de minerales en las dietas.
Los minerales de la dieta son esenciales no solo para el crecimiento, sino también para el equilibrio ácido-base y la homeostasis de los fluidos corporales de los peces.
El tracto gastrointestinal (TGI) está involucrado en el proceso de osmorregulación de la sal y el agua durante la digestión, pero este proceso puede verse obstaculizado cuando se altera el balance de electrolitos de la dieta (dEB=Na – K+Cl, mEq/kg).
Metodología
Para comprender mejor la interacción entre la alimentación y la osmorregulación a lo largo del TGI, se diseñaron dos dietas con dEB bajo (−100 mEq/kg) y alto (+600 mEq/kg).
Se alimentaron truchas arcoíris de agua dulce (peso inicial promedio, 306 g) durante 6 semanas. Las heces se recolectaron durante la última semana para análisis de digestibilidad. El muestreo final se llevó a cabo durante tres días, con peces muestreados en 2 puntos de tiempo después de la alimentación (3 y 7 h) y disecados para recolectar quimo de 4 segmentos GIT: estómago, intestino proximal, medio y distal.
El quimo se analizó en cuanto a materia seca, pH, osmolalidad, proteína cruda (PB) y contenido mineral. El óxido de itrio (Y2O3) se utilizó como marcador inerte para medir los flujos de agua, los flujos de minerales y la digestibilidad de los nutrientes de diferentes segmentos intestinales.
Algunos resultados
Tanto el dEB como el tiempo después de la alimentación alteraron (p<0,05) las características del quimo y los flujos de agua en el estómago y el intestino proximal, pero no hubo efecto de interacción (p>0,05). dEB también afectó (p<0,01) el pH del quimo y los flujos de sodio (Na) en el estómago.
La digestibilidad fecal de la materia seca (MS) y PB fue mayor (p<0,001) cuando los peces fueron alimentados con una dieta alta en dEB en comparación con una dieta baja en dEB.
Se observó lo contrario para la disponibilidad de Ca, que fue menor en la dieta alta en dEB que en la dieta baja en dEB (p<0,001).
En contraste con la digestibilidad fecal, la CP y la digestibilidad mineral medidas en los diferentes segmentos intestinales fueron diferentes predominantemente en el intestino medio y distal. Nuestros hallazgos sugieren que el GIT juega un papel en la regulación de las alteraciones causadas por el contraste dEB, y que esta regulación es más fuerte en el intestino medio y distal.
Además, esta regulación afecta la digestibilidad de nutrientes y minerales en los segmentos medio y distal del TGI.
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