La industria lo esperaba en primavera, pero el Gobierno se ha adelantado a lo previsto. El Ministerio de Pesca y Océanos dio a conocer el nuevo código de colores en el sistema de semáforos para la acuicultura que se aplicará durante los próximos dos años en Noruega.
La ministra de Pesca y Océanos noruega, Cecilie Myrseth, dijo que el nuevo código de colores en el sistema de semáforos dará como resultado más empleos, mayor creación de valor y mayores ingresos de exportación para Noruega.
Entre las trece áreas de producción de salmón, trucha y trucha arco iris a lo largo de la costa noruega, seis han recibido luz verde, cinco de luz amarilla y dos con luz roja.
Más allá de las previsiones de crecimiento anunciadas por el Gobierno noruego -21.000 toneladas de capacidad de producción en zonas verdes-, lo que más llama la atención de la nueva clasificación es el mantenimiento de las rojas. El informe del Comité de Acuicultura presentado, incluía consejos para que el sistema de semáforos debería ser evaluado y corregido, y proponía eliminar la necesidad de que los acuicultores redujeran la producción cuando los piojos de mar eran abundantes.
En ese momento, el ex ministro de Pesca y Océanos, Bjørnar Skjæran, señaló en su momento que las propuestas del Comité serían “importantes para el trabajo futuro del Gobierno para crear crecimiento de una manera predecible, controlada y sostenible”.
La actual ministra indicó “me preocupa que el impacto de los piojos del salmón esté aumentando en varias áreas, a pesar de que el objetivo es reducir el impacto. Si la industria quiere crecer, debe hacer cambios para reducir la presencia de larvas de piojos del salmón de las instalaciones”, enfatizó Myrseth.
Así funciona el sistema de semáforos
Para entender bien qué significa la decisión anunciada por el Gobierno noruego, es necesario explicar en qué consiste el sistema de semáforo que se aplica a la acuicultura del país desde 2017 para regular la capacidad de producción del salmón del Atlántico y que, según el Ministerio de Pesca y Océanos, tiene como objetivo garantizar un crecimiento predecible y sostenible de la industria acuícola.
El sistema divide la costa noruega en trece zonas donde la producción está regulada de acuerdo con un conjunto de indicadores ambientales, principalmente los niveles de infestación de piojos de mar. Así, dependiendo de cómo afecten al salmón salvaje de la zona, se decide si se permite a los acuicultores expandirse (zonas verdes), si la producción se mantiene sin cambios (zonas amarillas) o si se reduce (zonas rojas).
Como se mencionó, el informe del Comité de Acuicultura publicado en septiembre pasado, propuso eliminar la necesidad de que los acuicultores reduzcan la producción cuando abundan los piojos de mar, lo que en la práctica equivaldría a eliminar las zonas rojas.
En su lugar, sugirió que se establezcan “cortafuegos” entre las zonas para detener la propagación de enfermedades, así como otras medidas, como exigir a los salmonicultores que actúen contra los parásitos con un límite de infección inferior y que los que superen el límite estén sujetos a un impuesto sobre los piojos.
¿Cómo se ve el mapa después de de territorios éste 2024?
“El nuevo código de colores en el sistema de semáforos dará lugar a más puestos de trabajo, una mayor producción de alimentos noruegos, una mayor creación de valor y un aumento de los ingresos de exportación para Noruega”, dijo la ministra de Pesca y Océanos, Cecilie Myrseth.
El Gobierno declaró que los colores de este año se han determinado en función de las evaluaciones científicas del impacto del piojo de mar en el salmón salvaje para los años 2022 y 2023.
Proyección de crecimiento
Según los cálculos del Ministerio, con esta clasificación la industria acuícola noruega puede crecer un 6% en las zonas verdes de producción en 2024. Dicho crecimiento se distribuirá en dos etapas: primero, una parte (1%) a un precio fijo de U$16 mil por tonelada, y luego, el resto a través de una subasta.
Además, los acuicultores que cumplan los criterios de exención recibirán un crecimiento de hasta el 6% en función de las normas específicas de la zona de producción. Esto es independientemente del color del área de producción. El resto, incluyendo lo que no se venda a precio fijo en áreas verdes, se asignará a través de una subasta de nuevos permisos.
Esta decisión podría resultar en un aumento de aproximadamente 21.000 toneladas de capacidad de producción en áreas verdes, mientras que la reducción en las rojas se estima en aproximadamente 11.400 toneladas. Sin embargo, el Ministerio dice que la reducción real podría ser menor, dependiendo de cuánta capacidad de producción esté exenta de reducción bajo las reglas de exención.
Novedades para este año
El comunicado del Ministerio de Pesca y Océanos sobre los nuevos semáforos de acuicultura de 2024 destaca algunas novedades, como una evaluación de las poblaciones de salmón especialmente importantes y vulnerables y si están más afectadas que otras poblaciones en la misma zona. Además, también se ha realizado una evaluación de cómo el salmón salvaje se ha visto afectado por los piojos del salmón en los últimos siete años y lo que significa para las poblaciones de salmón salvaje en su conjunto.
Sin embargo, el comunicado del Gobierno también recuerda que “Al mismo tiempo, la acuicultura genera ingresos, tanto para la industria como para el sector público. Por lo tanto, las decisiones sobre la codificación por colores implican un equilibrio de varias consideraciones”.
Asimismo, se explica que el código de colores sigue directamente la regla de actuación en el sistema de semáforos en las zonas donde la valoración del impacto ambiental por parte de los expertos es la misma en los años correspondientes. Sin embargo, señala que, dado que esta evaluación difiere en 2022 y 2023, dos de las zonas, de North Hordaland a Stadt (PO4) y de Helgeland a Bodø (PO8), se han evaluado por separado.
“En ambas áreas que han sido evaluadas por separado, he puesto el mayor énfasis en la condición del salmón salvaje. En el PO4, también he hecho hincapié en el impacto de los piojos en el salmón salvaje a lo largo del tiempo y en la necesidad de reducir esta carga. En el PO8, ha sido importante no aumentar el riesgo de un impacto inaceptable y, por lo tanto, no ofrecemos crecimiento en esta área”, manifestó la ministra Myrseth.
Aprehensiones
Asimismo, Sjømatbedriftene – Seafood Companies, una organización empresarial nacional políticamente independiente que representa a todos los sectores de la industria pesquera desde la producción hasta las ventas en Noruega, había instado al Gobierno a detener la reducción de personal en las zonas de producción roja.
Al hacerlo, además de recordar las recomendaciones del Comité de Acuicultura, la organización también señaló que una mayor reducción podría tener consecuencias negativas significativas más allá de las empresas acuícolas.
“No hay duda de que las consecuencias podrían ser graves en términos de aumento de despidos y desempleo. Necesitamos capacidad de implementación política para establecer un nuevo esquema de tecnología ambiental, y rápidamente. Esto es algo que la ministra debería presentar como un asunto aparte antes del verano. Ni la industria, ni el salmón salvaje tienen tiempo para esperar hasta 2027”, dijo Robert H. Eriksson, CEO de Sjømatbedriftene. Tras conocerse la decisión anunciada, la organización se ha reafirmado en ello y ha expresado su decepción por el color que el Gobierno ha dado al sistema de semáforos.